LA INTELIGENCIA IV

LA INTELIGENCIA Y LA BONDAD EN LA CONDICIÓN HUMANA.

Nuestra capacidad de raciocinio nos permite reflexionar sobre la bondad o maldad de nuestras conductas, sobre el comportamiento humano y sobre como deberíamos ser: todas estas reflexiones son el contenido de la Ética.

La inteligencia humana se define por la capacidad de dirigir bien el comportamiento, utilizando la información para resolver problemas nuevos.

La naturaleza humana es inteligente, social y capaz de comportamientos voluntarios y libres.

BONDAD=EMPATÍA + INTELIGENCIA

La empatía es la capacidad natural -aunque variable para cada persona- de percibir el estado de ánimo de otra persona o ser vivo, incluso previendo su reacción ante nuestra conducta o la de los demás. El disgusto de una persona es rápidamente percibido por el empático y le afecta, lo mismo ocurre con la percepción de la satisfacción.

La bondad es la característica de una persona que consigue que su conducta genere relaciones satisfactorias con su entorno. Como consecuencia de esta relación se puede deducir que:

         - La bondad es una consecuencia de la inteligencia, y la selección natural tiende y ha tendido siempre a favorecerla.

         - Las personas poco empáticas difícilmente pueden generar relaciones satisfactorias. Los grandes malvados de la historia han sido insensibles al sufrimiento de los demás.

¿Me considero inteligente? ¿Me considero bondadosa?

Creo que es más importante ser buena persona y no pensar sólo en si se es más inteligente o menos, no creo que tenga mucha importancia.
Si lo que se considera por inteligencia se emplea de una forma positiva y constructiva, iremos por buen camino.
Personas consideradas inteligentes han ocasionado catástrofes en el mundo y no han tenido en cuenta la bondad. 
Valoramos la bondad como una inclinación natural a hacer el bien.